Preguntas abiertas y cerradas para niños

🎉 ¿qué es una pregunta abierta? cómo ayudar a los niños a pensar

Una pregunta abierta es aquella que no puede responderse con un simple «sí» o «no» o con una respuesta fija. Las preguntas abiertas se formulan en forma de declaración que requiere una respuesta más detallada. La respuesta puede compararse con los conocimientos que ya tiene el interrogador. 1] En el ámbito educativo se sabe que las preguntas abiertas son, en general, preguntas «correctas». Animan a los alumnos a ofrecer respuestas más detalladas que demuestren su comprensión. Son superiores a las preguntas cerradas (las que requieren una respuesta de sí/no) porque permiten un mayor debate e indagación, mientras que las preguntas cerradas sólo son útiles para hacer pruebas.
Esto, según Peter Worley, es una creencia errónea. El punto clave de Worley es que hay dos tipos de preguntas abiertas y cerradas: las gramaticales y las lógicas. Afirma que los profesionales de la educación deben buscar cuestiones «gramaticalmente cerradas, pero conceptualmente accesibles». 2] Una pregunta cerrada, por ejemplo, es «¿es correcto mentir alguna vez?» en lenguaje corriente: suscita una respuesta de sí/no. Sin embargo, es conceptualmente accesible de manera significativa. Cualquier respuesta inicial de sí/no puede ser «abierta» por el interrogador («¿por qué piensas eso? ), lo que da lugar a más reflexiones e indagaciones.

😜 Hacer preguntas abiertas (para niños pequeños)

¿Quieres ayudar a tu hijo a desarrollar su comprensión y su vocabulario? Mientras lee, hazle preguntas abiertas. Aquí tienes una lista de 50 preguntas abiertas para niños en edad preescolar que iniciarán una conversación, harán hablar a tus hijos y les ayudarán a aprender más.
Con este conocimiento, nosotros, como padres, profesores y cuidadores, podemos aprender mucho sobre las percepciones de nuestros hijos y utilizarlo como base para un mayor desarrollo. A continuación se ofrece una lista de recursos:
Antes de empezar a leer, haga preguntas abiertas a sus hijos. Para ayudar a crear un entorno, haz preguntas abiertas a los niños. Para conocer a los personajes, haga preguntas abiertas a los niños. Para hablar de los sentimientos, haga preguntas abiertas. Para confirmar la historia, haga preguntas abiertas. Después de leer la novela, haz preguntas abiertas para explorar.
1. Según el título, ¿de qué crees que trata la historia?
2.¿Cómo crees que acabará la historia?
3.¿Podrías explicar qué crees que intenta transmitir la ilustración de la portada?
4.¿Cómo crees que se le ocurrió al autor el título de este libro?
5.¿Qué podemos deducir de la portada sobre la historia?
6.Basándote en la sinopsis, ¿qué esperas conocer en este libro?
7.¿Qué crees que pasará al final de la historia?
8.¿Se te ocurre algún problema que pueda surgir en esta historia?

🌟 Preguntas abiertas y cerradas

A menudo hablamos de las rutinas para acostar a nuestros hijos, y todos sabemos que una rutina consistente a la hora de dormir envía señales a nuestro cerebro de que el sueño se acerca.

🧒 Preguntas cerradas o abiertas

A medida que su hijo crece, el contacto entre usted y él se vuelve más difícil. De repente, sólo obtendrás respuestas de una sola palabra, si es que hay alguna. Es posible que no disponga de mucho tiempo para relacionarse con su hijo entre su jornada escolar y sus actividades nocturnas. Te instamos a que hagas de la hora de dormir un momento de comunicación con #BringBackBedtime. Permítase entre 15 y 30 minutos por noche para volver a conectar con su hijo y conocer lo que está ocurriendo en su vida.
Una rutina regular a la hora de dormir puede ayudarles a relajarse y a dormir mejor. Su hijo se sentirá más seguro si tiene la misma rutina (o una similar) todas las noches. Cada noche, la rutina para acostarse con tu hijo consistirá en actividades similares, y tenemos algunas ideas para que la conversación sea una de las formas de relajarse y prepararse para dormir.

🌹 Preguntas abiertas

¿Cuál es la diferencia entre una pregunta cerrada y una abierta? Las preguntas cerradas requieren una respuesta de una o dos palabras y suelen provocar un sí/no o una respuesta correcta/incorrecta. Por ejemplo, «¿Te gustan las manzanas?» o «¿Qué color de crayón estás usando?».
Esto no quiere decir que se puedan evitar por completo las preguntas cerradas. Para pasar el día, tendrás que hacer preguntas cerradas. «¿Quieres un perrito caliente o un queso a la plancha para comer?», por ejemplo. Sin embargo, utiliza preguntas abiertas siempre que sea posible, tanto durante el juego como en la conversación con tu hijo.
Hacer preguntas abiertas es una forma fácil y eficaz de conocer mejor las ideas, las hipótesis y los deseos de tu hijo, a la vez que fomentas su crecimiento (y el tuyo, a medida que dominas el arte de hacer preguntas abiertas).
Una vez que haya formulado una pregunta abierta, es importante que le dé a su hijo el tiempo suficiente para considerar la pregunta y formular una respuesta. Al esperar, le estás indicando que te interesan sus ideas y sugerencias más que una respuesta concreta.